La misión principal del presente proyecto es la transformación de la Vía Verde Costera Sur, a su paso por Beniaján (localidad de la Región de Murcia) convirtiéndola en un espacio de interacción, contemplación y creatividad. Para ello, este proyecto de mediación se inspira en diversos pensadores y movimientos, como la visión de Jane Jacobs sobre el espacio público como lugar de comunicación y convivencia, la filosofía lúdico-artística de Robert Filliou y su concepto de Creación Permanente, así como la conexión con la naturaleza defendida por el artista Andy Goldsworthy. Raíles de Vida se desarrolló, principalmente, a lo largo de tres sesiones públicas que incluyeron talleres teóricos, recorridos artístico-lúdico por la Vía Verde durante los que se realizaron actividades creativas relacionas con el pasado histórico del lugar, la observación inmediata y la proyección de futuro del espacio en cuestión; sesiones de debate y diseño colectivo de las que derivó un juego destinado a cualquier paseante de la Vía Verde y que ofrece una mirada alternativa y lúdica sobre la misma; así como la realización de una travesía abierta a la comunidad en general donde se puso a prueba el nuevo juego colaborativo. Este último, de acceso libre, se titula “Desvelarí” y se compone de 71 tarjetas que comprenden 66 actividades divididas en 3 grupos de 22 repartidas por su temática sobre el pasado, presente o futuro. Sus retos están diseñados para que cualquier usuario de la Vía Verde Costera Sur pueda desarrollar una mirada más creativa y poética sobre este espacio recuperado. Gracias a un Contrato de Transferencia con el Ayuntamiento de Murcia y con el apoyo de la Fundación de los Ferrocarriles Españoles, “Desvelarí” también ha contado ya con ediciones físicas y se ha implementado en el colegio Monteazahar y el IES Beniaján, dentro de la Edición 24 del Día Nacional de las Vías Verdes. Los objetivos propuestos para la realización de este proyecto artístico fueron los siguientes: ‒ Promover la conciencia histórica y cultural. Mediante un juego colaborativo e interactivo, se busca revelar cómo la antigua vía férrea ha evolucionado hacia la actual Vía Verde, y cómo esta transformación ha impactado a la comunidad local y al paisaje de Beniaján a lo largo del tiempo. Se traza, así, una evolución del lugar: desde un espacio de tránsito hasta un espacio de encuentro, como un organismo que cambia, se transforma y que seguirá mutando. ‒ Fomentar la participación comunitaria y la visión del futuro. Al invitar a los participantes a imaginar futuras intervenciones creativas y mejoras en el espacio, este proyecto persigue fomentar un diálogo comunitario sobre cómo deseamos que evolucione nuestro entorno. ‒ Recuperar la conexión emocional con el lugar. Con especial atención a la estación de tren transformada en centro de desarrollo comunitario y la zona de las antiguas vías de tren convertida en vía verde, este proyecto aspira a fortalecer el vínculo emocional de la comunidad con estos espacios significativos. ‒ Poner en valor la recuperación de los espacios urbanos abandonados. Este proyecto quiere subrayar la importancia de la revitalización de las zonas urbanas que han quedado en desuso, como una necesidad para prevenir su deterioración y marginalidad.